Claves para la felicidad

Un tema que me interesa mucho y al cual le he dedicado horas de estudio es la felicidad. Parece fácil pensar que ser feliz es reír a piernas sueltas, tener pareja o una cuenta millonaria en el banco. "Que todo este bien".

En algunos de los libros de la enseñanza espiritual que práctico cuento con varios discursos que abordan la felicidad. Uno en especial menciona que la felicidad cuenta con dos claves básicas para lograr experimentar una felicidad plena.

La primera clave es el Auto-Control. Para ser feliz debo controlarme, no sería como limitarme o inhibir mis deseos de estar eufórica donde quiero y cuando quiero. Esta reflexión puede llevarnos a caer en la cuenta que ser feliz no significa burlarse de otros, hacer bromas o simplemente ignorar el mundo a tu alrededor ya que tu eres feliz y los demás no.

Comprender que la felicidad es un equilibrio de tus emociones que te permite actuar de acuerdo a las circunstancias en que te encuentres, que no te llevará a lastimar a otros o hacerlos sentir mal. Aquí veo porque es un acto de auto-control más que un descontrol desenfrenado. Ya que respetas y consideras a las personas a tu alrededor. Ser feliz te lleva a ser reverente con la vida que te rodea.

La segunda clave es la Auto-Corrección. Cuántas veces hemos sido impertinentes con personas, familiares o amigos por hacernos el gracioso o una persona positiva y alegra. Eso no es todo_ni hablar que te excusas y justificas que por ser una persona alegre tus comentarios deben ser bien recibidos porque están llenos de tus buenas intenciones. Si el auto-control te lleva a observarte y ver a tu alrededor, la corrección te permite ajustar tu forma de ser de acuerdo a las circunstancias. 

Si mencionaste una palabra graciosa, para cambiar la atmósfera pesada a tu alrededor o sencillamente querías que hubiera un poco de ambiente alegre y no fue bien recibida, tranquilo es posible que se te fue la mano no era el momento indicado; acepta el error y ofrece tu perdón que se convierte en el antídoto para borrar todas las faltas, pero sabiendo que la próxima vez no volverás a incurrir en la misma falta.

Las dos claves de la felicidad el auto-control y la auto-corrección que puede ayudarnos a desarrollar una conciencia equilibrada y constructiva a nuestro paso.